miércoles, 9 de enero de 2013

Lejos

     Estando lejos los problemas no existen o al menos se postponen, esperan, se diluyen. Estando lejos tu vida se torna una realidad paralela, no es real, la olvidas.

     Durante muchos años me invadía una alegría extraña por el simple hecho de tomar el bus y llegar al punto donde se cruzan las antiguas murallas de Bizancio, era verlas y sentirme que entraba en algún lugar de la historia pasada de esta ciudad...durante unos segundos éramos solamente las murallas y yo, sin coches, sin gente, sin ruido. Despúes vuelta a la realidad, tráfico y más tráfico, multitud y más multitud. Estambul y más Estambul.

     Y la gente me pregunta por España, la crisis, si, la crisis. Y les comento que si, que la cosa está mal...y les doy mucha pena, y se preocupan...y ellos me dicen orgullosos lo mucho que la economía está creciendo en su país, que Europa se desmorona y sin embargo ellos van viento en popa (¿será lo que les dicen en la tele?)...Y como me pasa siempre hay muchas cosas que nunca digo, al igual que en mi trabajo, me callo (supongo que por eso me apetecía lo del blog). Porque ¿quién es "la economía"?, ¿quién la controla?, ¿un 3/5% de la población?...yo sigo viendo niños pidiendo para comer en las calles, hace 9 años que vengo y en apariencia todo está exactamente igual. Me callo porque no es necesario restregarles que aunque los servicios sociales en España se hayan ido a la mierda aún así todavía son mejores que aquí....¿La economía y el crecimiento de que sirven si sólo se benefician unos pocos? ¿qué importa que haya subido el PIB pc si al final los de abajo están igual o peor?...


No entiendo ese patriotismo estúpido basado en estar orgulloso de mejorar unas cifras económicas que el 90% de la población no sabe ni lo que significan. Curioso. Contradictorio. Muy turco.

    

    
    


   
    


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